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Después de la desafortunada gestión Angelici, Boca vuelve a tener presencia en la Asociación del Futbol Argentino

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Con el nuevo mandato de Claudio Tapia al frente de la AFA y el rol que ocupará Jorge Amor Ameal, Boca no sólo estará a cargo de una de las seis vicepresidencias de la entidad sino que también pondrá en la mesa algunas inquietudes en la sede de la calle Viamonte. Al cabo, cuando apenas había tomado el sillón de Brandsen 805, el presidente acompañó con rapidez la idea de terminar con la Superliga para devolverle el poder del fútbol argentino a la entidad madre.

Reuniones con Hugo Moyano primero y con Rodolfo D'Onofrio después allanaron el camino justo cuando Daniel Angelici​, todavía aferrado al cargo de vicepresidente pese a ya no estar al frente del club, reaparecía para confrontar.

La idea de Ameal es armar una mesa de conducción que entienda que el negocio del fútbol debe pararse sobre las patas de los equipos más poderosos para subsistir. En cada aparición pública, reitera que deben cambiar algunas condiciones del reparto del dinero proveniente de los derechos de TV.

Por eso propuso alinear fuerzas con Mario Pergolini y Marcelo Tinelli, quienes se reunieron con Tapia e hicieron propuestas para mejorar la venta del fútbol argentino desde la mirada de la profesionalización, la tecnología y el marketing.

"Boca quiere que haya 20 equipos, torneos ida y vuelta y que se mantengan los promedios", reconoció Ameal. Tal como adelantó Clarín hace un mes, esa postura fue la que trasladó a la AFA cuando se confeccionaron las reestructuraciones y en la que todavía insiste en debatir pese a la resolución sobre los torneos.

Con el agregado de sostener ese concepto para los descensos, porque cree que es una forma de mantener el incentivo de competencia hasta el final, algo que no ocurre en Europa y que cada año incluye investigaciones por acuerdo o arreglo de partidos entre equipos que necesitan los puntos y otros que ya no juegan por nada.

El ingreso por objetivos deportivos también es otro ítem a reforzar. "En todas las ligas del mundo hay un premio para el campeón y otros escalonados. Incluso la Conmebol paga así, pero en la AFA eso no ocurre. Es un tema a charlar", contaron desde Brandsen 805. Es una de las discusiones a tener en el corto plazo. Y más: creen que si Boca y River son los que sostienen el encendido, deberán percibir mayor dinero en cada temporada.

Con una mirada política más cercana entre todas las partes del fútbol, el vínculo de Ameal con Sergio Massa también es algo que tendrá su peso específico. Sin Angelici, la conducción del fútbol argentino casi no tiene representantes opositores al gobierno de Alberto Fernández. Pero, como en todo armado político, eso puede mutar rápido. Así como Massa hoy es oficialismo, también puede ser opositor. Por eso en Boca quieren reforzar la idea de una base de conducción que se despegue de los intereses del gobierno de turno.

Pensar los costos de los operativos policiales, la búsqueda de mejores ingresos para la institución y ajustar calendarios de las competencias que no asfixien a quienes representan a la AFA en el exterior son algunos de los temas que Boca buscará instalar en las próximas semanas en el debate interno de la AFA.

La figura de Juan Román Riquelme todavía no se vinculó con la conducción del fútbol argentino, pero su aparición en varios partidos del fútbol femenino​ de Boca abren la puerta a un respaldo a esa idea de la AFA y de Conmebol, por lo que el Diez será una voz que puede entrometerse desde el costado futbolístico y no empresarial.

Si bien será Ameal quien aparezca en las primeras reuniones, la intención de la Comisión Directiva es ceder ese sitio para Roberto Digón, vicepresidente tercero, histórico directivo de la institución y con bases sólidas en el sindicalismo.  Con esa confección, el club tendría un trinomio de participación: Ameal como la voz desde la presidencia de Boca, Pergolini en la asesoría general de la tecnología y Digón como el representante en la AFA. Clarín

La Superliga Argentina de Fútbol dará este martes a las 15 el primer paso concreto hacia su desaparición. La Asamblea de la AFA votará que los 24 clubes que la integran vuelvan a estar bajo su ala, en una reunión virtual autorizada por la Inspección General de Justicia (IGJ). El encuentro también incluirá la reelección de Claudio Tapia como presidente de la Casa del Fútbol, diez meses antes de que termine su mandato, y para poner en funciones al nuevo comité ejecutivo, en el que quedará plasmado el regreso de River y San Lorenzo a las oficinas de la calle Viamonte luego de casi cuatro años de ausencia.

En la práctica, Tapia quedará como el dirigente más poderoso del fútbol argentino . Al no ser más una asociación civil, la Superliga (que además será rebautizada como Liga Profesional de Fútbol Argentino ) necesitará de la aprobación de la AFA para cada paso que quiera dar. Marcelo Tinelli será el presidente ejecutivo del nuevo orden de la primera división, que mantendrá su independencia a la hora de distribuir los recursos que consiga a través del marketing y la venta de los derechos de TV, tanto locales como internacionales. Además, tendrá la capacidad exclusiva de organizar sus campeonatos.

"Dentro de todo lo malo que implica dejar de ser una asociación civil, el nuevo estatuto no está tan mal", admiten cerca del animador de Bolívar. La ex Superliga y flamante Liga Profesional tampoco perderá su independencia física: por más que en las últimas semanas la AFA dejó trascender su intención de que la nueva liga ocupara el octavo piso del edificio de la AFA en Tribunales, la liga permanecerá en las oficinas de Puerto Madero, sobre la calle Olga Cossettini. De hecho, la sede que desde hace tres años cobija a la Superliga ya fue ploteada con el nuevo logo de la Liga Profesional y el escudo de la AFA.

Desde hoy, además, Daniel Angelici dejará su puesto como vicepresidente de la AFA. Enfrentado con Tapia desde diciembre pasado, el ex presidente de Boca perdió las elecciones en su club con Jorge Amor Ameal, pero no quiso desprenderse de su puesto en el comité ejecutivo. Hasta que la AFA convenció a los clubes de primera de la necesidad política de aniquilar el llamado "doble comando" y quedar todos bajo la administración Tapia. Con la reelección del "Comandante" (como le dicen puertas adentro al histórico dirigente de Barracas Central), se reforma también la composición del comité ejecutivo, que pasa a tener seis vicepresidencias.

La reunión virtual se realizará con la participación de 46 asambleístas mediante el formato de videoconferencia. Tapia, que lleva tres años al frente de la AFA, comenzará entonces un segundo mandato hasta 2025 (con la posibilidad de seguir hasta 2029). El ex presidente de Barracas Central encabeza una lista única que se gestó tras la disolución de la Superliga y la creación de la flamante Liga Profesional.

Los seis vicepresidentes que acompañarán a Tapia serán Ameal (Boca), Tinelli (San Lorenzo), Hugo Moyano (Independiente) y Rodolfo D'Onofrio (River) por e la Liga Profesional; Marcelo Achile (Defensores de Belgrano) será vicepresidente por el ascenso metropolitano; y Guillermo Raed (Mitre de Santiago del Estero) será vicepresidente por el ascenso Interior.

Además, Victor Blanco (Racing) seguirá siendo el secretario general de AFA; Luciano Nakis (Armenio) como prosecretario y Horacio Martignoni (Sarmiento) como protesorero. Por otra parte, Nicolás Russo (Lanús) será el secretario ejecutivo y Maximiliano Levy (Almirante Brown) será el prosecretario ejecutivo. Los vocales serán 16, de los cuales siete son por la Liga Profesional, seis por el Ascenso, dos por las Ligas y uno por el Torneo Federal. La Nacion