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La tristeza del balón (de la nro. 5 al nro. 10). 6to capítulo

Por Leandro Valdés @leandrovaldesVM

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Acá estoy otra vez… y nuevamente triste.

Volvió Boca a los entrenamientos, se fueron Perotti y Rivero, vendieron a Viatri, Sánchez Miño y entró plata por Mouche. Ahora que encontraste un lateral que te sepa pasar, que hizo varias asistencias, lo quieren vender. Encima no llegó ningún refuerzo salvo el joven Calleri, que vino por una plata que el descendido All Boys le debe a Boca. Y entrenó Burdisso! La lluvia de nombres que podían llegar es aún menor que la de nuestras lágrimas.

Sí, como le siguen desarmando el plantel a Bianchi (y a Boca) da tristeza, como que en vez de invertir en nosotras o en el campo de juego, los dirigentes presupuesten $700.000 para arreglar el palco o se queden con los Citroën en vez de pedir más plata para el club o cedérselos a los entrenadores de juveniles o se los faciliten a los pibes del club. ¿Y la secretaría técnica que trajo a Riaño y a Albín? Les duplicaron el salario!

También me hace llorar que quieran prescindir del lugar más lindo donde rodar y girar: la Bombonera…. Pero sabés que Román, no puedo dejar de pensar en que Boca entrenó ayer sin tu presencia.

Te entiendo, desde la primera vez que te vengo hablando te dije que te iba a bancar, a respetar, que el destrato y mal trato que recibís era notorio, tan desagradable como muchos me tratan a mi.

Cuando se supo que no ibas a entrenar, hubo una reunión secreta de balones en Casa Amarilla para que ver que hacíamos. Decidimos presentarnos en utilería para no molestar a Carlos, para que el DT pueda laburar pero nosotras también estamos en píe de guerra.

Hablamos con la Brazuca y nuestras otras colegas brasileras: allá te espera con los gajos abiertos, están desesperadas. Yo también lo estaría, obviamente. Ellas están a pura caipirinha, disfrutando de una mundialitis aguda, y encima les puede caer Román a sus campos. Los infladores no dan a vasto de tan llenas que están.

Pero acá hay desolación, tristeza, incertidumbre. Nosotras no nos comemos ninguna operación. Ni la tardíamente presentada renuncia del tesorero Sánchez Córdova (otra historia a lo Angelici) ni el verso del dólar blue (¿Estás cobrando un dólar a $ 6,35? En épocas de inflación cada vez ganás menos? Dejá, con la guita no me meto).

Esto vamos a hacer: hoy vamos al entrenamiento de la tarde. A las 4 pm estaremos en la Bombonera gritando por vos. Ya sabemos que sólo ingresarán algunas (las de utilería), que nos revisarán el baúl del auto, que los socios no podrán ingresar al club y que adentro sobrará la seguridad privada (y empresas que cobran mucha guita por ello) como su fuésemos pungas que queremos copar un barrio cerrado. Seguramente no habrá la gente que desearíamos pero no hay tiempo para nada, quedarse quietos y mirar los hechos pasar no es para nosotras.

Iremos a la Bombonera todas las pelotas que podamos, nunca te vamos a fallar, vivimos en deuda con vos y estas son algunas de las formas de retribuir tu aprecio, tu cariño y tu respeto para con todas nosotras, pase lo que pase.

Por Leandro Valdés*


*Leandro Valdés es escritor y hace poco publicó el libro  "Los verdaderos mellizos de la Boca" de editorial Corregidor.