Boca sigue extrañando los goles de Palermo y aun así decidió quedarse sin un 9 de área suplente
Aplauda aplaudan, no dejen de aplaudir, los goles de (¿?) que ya van a venir |
Con la venta de Nico Blandi a San Lorenzo Boca se queda sin un 9 suplente con las características de referente de área. Algunos amigos no hacían notar que esta Claudio Riaño, pero este jugador mide apenas 1.72 mts con lo cual habría que cambiar el esquema de ataque y dejar de tirarle centros a Martin Palermo. Por qué Boca aun le sigue tirando centros al gran goleador de la historia de Boca, aunque ya hace tiempo que se retiró. Quizás en el pensamiento de Bianchi esté poner a Román de punta para no hacerlo correr tanto, a sabiendas que podría jugar ahí tranquilamente y no desgastarlo tanto. O probar con pibes que aún están verdes y son una incógnita para nosotros que no los vemos asiduamente y que la reserva no nos muestra por haber sido borrada de las previas en La Bombonera, lamentablemente.
La info sobre el tema en una nota de Canchallena: Con la definición de los últimos detalles de la salida de Nicolás Blandi se comienza a escribir una historia casi inusual, en los últimos años en Boca. Por el contexto, por la obligación y hasta por el hombre que conduce, Carlos Bianchi, parece casi irreal que el conjunto de la Ribera apenas disponga de un centrodelantero natural en su plantel, de cara al primer semestre de 2014. Que Emmanuel Gigliotti sea el único goleador con el que cuenta el Virrey resulta extraño, sensación que se potencia si se revisan las estadísticas, que indican que en los últimos 20 torneos disputados, desde 2008 hasta aquí, el conjunto Xeneize siempre tuvo más de un número 9 entre sus filas. Pasaron 11 atacantes y sólo Martín Palermo se mantuvo en el puesto, pero ahora el Virrey apuesta por el Puma.
Es cierto que Boca sólo tendrá un torneo por disputar en la primera parte del año, pero si se considera como antecedente que en 2013 sufrió más de 60 lesiones en su plantel, parece una apuesta de alto riesgo tener sólo a Gigliotti como centrodelantero y a Claudio Riaño como alternativa para el puesto; el atacante que llegó de San Martín de San Juan puede desempeñarse en la posición, aunque no es su lugar natural en el campo.
Y si bien es real que Blandi, en 80 partidos con Boca, marcó 24 goles, no parece una gran receta venderlo a San Lorenzo. El conjunto Xeneize, hace apenas 12 meses, contaba en su plantel con tres delanteros: Santiago Silva (marcó 20 goles en 61 partidos), Lucas Viatri (39 en 164) y el propio Blandi. Ninguno se pudo adueñar de la número 9.
Nadie podrá poner en discusión el poder goleador de Gigliotti, que en 20 partidos marcó 9 goles con la camiseta Xeneize. Sin embargo, Boca siempre supo tener variantes en su bloque ofensivo. Lucas Viatri, que está en Chiapas, de México, y debe regresar al club, fue uno de los delanteros que más lucharon por su lugar, ya que le tocó compartir plantel con el eterno Palermo, con Silva y hasta con Darío Cvitanich (convirtió 11 tantos en 43 encuentros). Incluso, el propio Blandi, hace apenas seis meses había declarado: "Me da más confianza tener competencia. Me tocó pelear el lugar con Viatri, Silva, Cvitanich y aun así tuve mi espacio. En Boca siempre existe una exigencia muy alta en el puesto".
Y sin dudas que la historia también lo marca, porque detrás de los 472 goles de Palermo, pasaron jugadores como Mauro Boselli (19 goles en 79 partidos), Luciano Figueroa (8 en 23) o Bruno Marioni (5 en 21), por citar algunos. Pero no sólo aparecen en el recuerdo atacantes naturales en el puesto, sino que jugadores como Rodrigo Palacio (89 tantos en 207 juegos), Sergio Araujo (2 en 35) y hasta Nicolás Gaitán (13 en 93), se han desempeñado en varios partidos como referencias de área. Y en la nómina de los delanteros que circularon en los últimos cinco años aparece en el plantel del torneo Apertura 2009 el nombre de Lucas Pratto (no convirtió en dos juegos), el goleador que hoy se luce en Vélez y acumula 20 conquistas en 77 cotejos.
Está claro que Boca necesita volver a nutrirse de atacantes. Y parece que Bianchi no guarda demasiadas expectativas, por el momento, sobre los chicos del club. Más allá de tener a Francisco Di Franco, similar en su juego a Blandi, también cuenta con chicos como Mauro Dalla Costa (19 años), Santiago Krieger (20) y Dylan Glaby (20). Y hasta se desprendió de Kevin Genaro, un chico de 21 años que está jugando en la tercera división del fútbol español. En medio de una situación como ésta, es natural que los dirigentes en los últimos días hayan adquirido en 300.000 dólares el 30% del pase de Jonathan Calleri, un delantero de 20 años, de All Boys (con Julio Falcioni comenzó a desempeñarse como número 9), que se sumará al plantel Xeneize en junio próximo.
"Con el tres por ciento de los goles que hizo Palermo estoy bien, pero no pienso que juego en su lugar porque él es irreemplazable", dijo Gigliotti, que con la salida de Blandi se quedará con la camiseta número 9. Una pesada mochila para el delantero que será la principal carta goleadora en un semestre en el que Boca no puede equivocarse.
Fuente: Canchallena
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