<< Llegan Rivero y Roman? | Principal | Cortitas y al pie 15/11/2011. Por @EmiiMP9 >>

La Bombonera, nuestro segundo hogar…o el primero?

Conocé la historia del épico estadio, que nos enorgullece y emociona a quien lo visita

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Allí está, erguida, sobresaliendo entre las humildes casitas del Barrio de La Boca del Riachuelo, como estandarte indiscutible de una pasión por muchos inentendible, allí, transformada hoy en “Templo del Fútbol Mundial”, es la “Gloriosa Bombonera”, la familiarmente llamada la “Cancha de Boca”. Sin embargo, el Club más popular de la Argentina, la denominada “mitad más uno del país”, tuvo otras canchas, seguramente convocantes de la misma pasión que hoy nos agrupa.
La primera cancha del Club Atlético Boca Juniors se ubicó en los terrenos de la Dársena Sud, en las cercanías de las hoy desaparecidas “Carboneras de Wilson e Hijos”, en Juan de Garay y la Dársena Sud. Allí disputó Boca Juniors sus encuentros oficiales cuando participó en la Segunda División del fútbol argentino, el primero de ellos frente al representativo de Bernal, al que venció por 7 goles a 0, el 10 de mayo de 1908.
Boca Juniors ejerció en ese predio la localía hasta 1912, disputando el último encuentro el 8 de Septiembre, frente al conjunto del Club Riachuelo (antecesor del glorioso Sportivo Barracas), al cual derrotó por 3 goles a 1.
Sin embargo, ante un reclamo del Gobierno Nacional, Boca Juniors debió abandonar los terrenos donde estaba ubicada la cancha, los cuales alquilaba, y debió deambular por largo tiempo en busca de un terreno.
En 1913, Boca Juniors pasó a militar en Primera División, producto de una reestructuración del Fútbol Argentino, haciendo las veces de local en las primeras fechas, en la cancha de Estudiantes de Buenos Aires. Esta última se hallaba ubicada en los terrenos que hoy corresponden a la Avenida del Libertador y la calle Fray Justo Santa María de Oro, en el Barrio de Palermo, muy lejos de La Boca.
El primer encuentro como local, lo disputó en la citada cancha, el 11 de mayo de 1913, enfrentando al representativo de Banfield, con quien empató en un gol, convertido para Boca Juniors en la oportunidad por el delantero Arnulfo Leal.
En 1914, Boca Juniors, ante la imperiosa necesidad de lograr una localía, debió mudarse de su barrio natal a la localidad de Wilde, en el partido de Avellaneda, Provincia de Buenos Aires, más precisamente en el solar que hoy corresponde a la intersección de la calle Las Flores y el Acceso Sudeste. La partida de Boca Juniors de su barrio natal ocasionó una reducción importante de su masa societaria (de 1500 a 300 socios), lo que casi provoca su desaparición.
Jugó en esta cancha de Wilde durante un breve lapso, más precisamente desde 1914 hasta 1915 y los resultados obtenidos en ella fueron, demás está decir, desalentadores, por lo que apresuraron el regreso al barrio natal. El primer encuentro oficial lo disputó allí el 7 de Junio de 1914, venciendo al Quilmes Atlethic Club por 7 goles a 0 (2 goles de Donato Abbattángelo, 2 de Isidoro Cotero y los restantes de Alfredo Taggino, Horacio Lamelas y Juan Pieralini). En el último encuentro, realizado el 7 de noviembre de 1915, derrotó también por goleada a San Lorenzo de Almagro por 5 a 0 (con goles de Leonardo Galeano, Alfredo Taggino y el zaguero sanlorencista José Coll, en 3 oportunidades, pero en contra de su valla). Para ese último partido, Boca Juniors alineó a Zacevich; Horacio Lamelas y Luis Cerezo; Arcayo, Máximo Pieralini y Frattini; Pedro Calomino, Ruggero, Enrique Colla, Leonardo Galeano y Alfredo Taggino. Para la estadística, el partido frente a Quilmes constituyó el primero que jugó Boca Juniors como local en Primera División en cancha propia.
Durante este último año Boca Juniors cumplió una muy mala campaña y estuvo a punto de perder la categoría, llegando a ubicarse en los últimos puestos de la tabla de posiciones (descendían los 4 últimos) durante gran parte del torneo, zafando de esta situación en las últimas fechas.
Actuando como local en Wilde, Boca Juniors obtuvo un saldo negativo, ya que disputó 17 encuentros, de los cuales ganó sólo 5 (30%), empató otros 5 (30%) y perdió los 7 (40%) restantes. Convirtió en esa cancha 24 goles y le anotaron 27.
Volvió en 1916 Boca Juniors al barrio de su nacimiento, más precisamente a los terrenos ubicados en Ministro Brin y Senguel. Allí enfrentó en su primer encuentro oficial al conjunto de Atlanta, con quien igualó 0 a 0, el 11 de junio, en momentos que ocupaba, al igual que el año anterior, los últimos lugares de la tabla de posiciones.
Sin embargo, las instalaciones fueron inauguradas extraoficialmente con una gran fiesta, el 25 de mayo de ese año, enfrentando en la oportunidad al conjunto de Gimnasia y Esgrima de Buenos Aires, que militaba por ese entonces en la primera división. Boca Juniors alistó en la oportunidad a Luis Solans; Horacio Lamelas y Victorio Capeletti; Carlos Cappellini, Máximo Pieralini y Alfredo Elli; Pedro Calomino, Enrique Bertolini, Enrique Colla, Leonardo Galeano y A. Lodeiro. El resultado del encuentro amistoso fue 2 a 2, con goles de Enrique Colla y Pedro Calomino para Boca. El árbitro del encuentro fue Héctor Alfano y la concurrencia multitudinaria, según las crónicas de la época, festejó ruidosamente el regreso de Boca Juniors a su barrio natal.
A partir de su afincamiento definitivo en el Barrio de La Boca, Boca Juniors comienza a crecer en una recta ascendente que lo llevará, a partir de 1919, a ocupar los primeros lugares del fútbol argentino primero y luego del fútbol mundial.
En esta cancha obtuvo Boca Juniors sus primeros logros deportivos: ganó su primera estrella en 1919, más precisamente al vencer a Sportivo Almagro (hoy Almagro) por 4 goles a 0, el 4 de enero de 1920.
Según las crónicas de la época, el encuentro se desarrolló ante una multitud, que llenó desde horas tempranas las graderías de madera del estadio boquense. El equipo local presentó a Américo Tesoriere; Andrés Roque Cortella y José Ortega; Alfredo López, Mario Busso y Alfredo Elli; Pedro Calomino, Pablo Bozzo, Alfredo Martín, Alfredo Garasino y Pedro Miranda. La visita se alistó con Recanatini; Vieyra y Jaureguizar; Capeletti, Barreto y del Cerro; Rubbo, A. Rodríguez, Celestino Adet, Olivieri y José Adet. Los goles del ganador fueron conseguidos por Alfredo Martín a los 44’ y 62’ y Pedro Miranda a los 19’ y 70’. Sin embargo el encuentro no pudo finalizar, ya que una vez convertido el último tanto, los jugadores de Almagro agredieron al árbitro V. Profumo, quien dio por terminado el partido.
La ventaja obtenida por Boca Juniors luego de este triunfo, que lo hacían inalcanzable para sus perseguidores, y las altas temperaturas del receso veraniego, obligaron a la Asociación Argentina a decretar al entonces puntero como Campeón de la temporada 1919.
También obtuvo Boca Juniors jugando en esa cancha su segunda estrella en 1920, militando en la Asociación Argentina, venciendo en el partido consagratorio a Nueva Chicago por 7 goles a 0, el 19 de diciembre de 1920.
Bajo las órdenes del juez E. Couy, Boca Juniors alistó a Américo Tesoriere; Andrés Roque Cortella y José Ortega; Alfredo López, Mario Busso y Dionisio Becaeas; Pedro Calomino, Pablo Bozzo, Alfredo Martín, Felipe Galíndez y Marcelino Martínez. El visitante lo hizo con E. Tirante; V. Pagliarini y Juan Locatti; H. Rubio, Romeo Corvetto y Emilio Solari; Juan Villagra, M. Cozoza, A. Santabroglio, J. Maglio y A. Giusani.
Los goles del local, quien jugó gran parte del encuentro con 10 jugadores por lesión de Calomino, fueron convertidos por Martínez a los 25', Bozzo a los 28', Galíndez a los 29', Alfredo Lópeza los 60', Bozzo a los 61' y 87' y Martín a los 89'.
El último encuentro oficial en esta cancha tuvo lugar el 16 de Junio de 1924, cuando Boca Juniors venció por 3 a 1 a Sportivo Barracas, con goles marcados por Domingo Tarascone, Antonio Cerrotti y Dante Pertini.
Boca Juniors durante este lapso obtuvo los títulos de Campeón de la Tie Cup Competence (frente a Nacional de Montevideo pero en cancha de Sportivo Barracas) en 1919 y de la Copa de Honor “Cusenier”, en 1923 (aunque edición 1920), tras vencer a Universal de Montevideo, transformándose así estos últimos dos, en los primeros logros internacionales de la Institución.
Localmente, Boca Juniors obtuvo las Copas Competencia de 1919 y las ediciones 1920 y 1923 de la Copa Ibarguren (disputada entre los campeones de la Asociación Argentina y la Liga Rosarina).
A partir de 1924, la ubicación de la cancha de Boca pasaría a ser la misma de nuestros días, en el predio comprendido por las calles Brandsen y Del Crucero (hoy llamada Del Valle Iberlucea) y los terrenos del Ferrocarril General Roca, cercanos a la Estación de Cargas “Casa Amarilla”.
En una emotiva ceremonia, la bandera oficial de Boca Juniors, fue trasladada a pie por un reducido grupo de caracterizados socios boquenses, desde la vieja cancha hasta la nueva ubicación, seguidos de aproximadamente 3.000 personas, todos fervorosos hinchas boquenses.
La inauguración del nuevo Estadio se produjo el 6 de junio de 1924, cuando Boca Juniors enfrentó amistosamente a Nacional de Montevideo, venciéndolo por dos goles contra uno, conquistados por Domingo Tarascone y Dante Pertini.
La festividad contó con, además de una nutrida concurrencia, la presencia del entonces Presidente de la República, Marcelo Torcuato de Alvear, quien dio el puntapié inicial del encuentro. Acompañaban al Mandatario argentino la Primera Dama y el Ministro de Guerra, General Justo.
La comitiva presidencial fue recibida Oficialmente por el Sr. Cariboni y el Presidente del Club Boca Juniors, Manlio Anastasi, mientras que las mujeres boquenses entregaron flores a los visitantes”.
Boca Juniors formó en la oportunidad con Américo Tesoriere; Ludovico Bidoglio y Ramón Mutis; Segundo Médici, Alfredo Garassino y Alfredo Elli; Domingo Tarascone, Antonio Cerrotti, Bergamini, Carmelo Pozzo y Dante Pertini. No obstante el triunfo boquense, la concreción del primer gol en esta cancha correspondió a un jugador uruguayo.
Meses más tarde, precisamente el 3 de Agosto de 1924, Boca Juniors disputó en esta cancha su primer encuentro Oficial, en el que venció al Club Palermo por 5 goles a 2, convertidos por Domingo Tarascone, Antonio Cerrotti, Alfredo Garassino, Carmelo Pozzo y Alfredo Elli.
Boca Juniors alistó ese día a Américo Tesoriere; Ludovico Bidoglio y Ramón Mutis; Segundo Médici, Mario Busso y Alfredo Elli; Domingo Tarascone, Antonio Cerrotti, Alfredo Garasino, Carmelo Pozzo y Dante Pertini. Durante ese año, además, Boca Juniors, que comenzaba a ser el conjunto predominante junto con Huracán de la Asociación Argentina de Football, se adjudicó el campeonato de Primera División de 1923 y 1924, este último en forma invicta.
Por esos años, el hecho de que Boca Juniors fuera derrotado en su reducto era una rareza, y como ejemplo podemos decir que se mantuvo invicto durante 52 partidos consecutivos como local, entre el 10 de mayo de 1923 (cuando fue vencido por Argentinos Juniors por 2 a 1) y el 26 de agosto de 1928 (cuando lo derrotó Talleres de Remedios de Escalada por 1 a 0).
Durante este lapso, Boca Juniors convirtió en su cancha 176 goles y le convirtieron sólo 20, con un promedio de 3,38 goles a favor y 0,38 gol en contra por partido, siendo el goleador Domingo Tarascone, con 58 conquistas, a un promedio de 1.11 gol por partido.
Este récord, sólo superado (aunque con reparos, ya que perdió un partido frente a Independiente que le fue luego dado por ganado) por el Racing Club entre 1913 y 1920, así como otras glorias del historial boquense, fueron sepultados durante años, quien sabe obedeciendo a que intereses mezquinos, posiblemente ejecutados por aquellos personeros de Instituciones que no obtuvieron iguales logros durante la etapa del amateurismo de nuestro fútbol.
Como si lo antes descrito fuera poco, debe acotarse que durante el lapso comprendido entre el 23 de mayo de 1923 y el 13 de septiembre de 1925, Boca ganó 18 partidos consecutivos en condición de local (sólo superado por Racing Club con 17 victorias en 1915 y 1916).
El Domingo, 24 de Diciembre de 1929, se disputó frente a Newells Old Boys de Rosario, consagrado luego Campeón de la Liga Rosarina, el primer partido nocturno en la cancha de Boca. El resultado del mismo fue 5 a 2 favorable a Boca Juniors, que en la oportunidad alistó a Manuel Merello; Bidoglio y Valentín Bolaña; Segundo Médici, Manuel Fleitas Solich y Américo Amoia; Donato Penella, Esteban Kuko, Mario Evaristo, Roberto Cherro y Antonio Albertino. Los goles de Boca Juniors esa noche fueron conseguidos por Esteban Kuko y Donato Penella, en dos oportunidades cada uno, y el restante por Mario Evaristo.
En la misma cancha de Boca, el local se adjudicó, el Domingo, 22 de marzo de 1931, el torneo de 1930, último del amateurismo, tras vencer por 4 a 1 al representativo de Atlanta.
En la oportunidad, bajo las órdenes de Natalio Valdatta, Boca Juniors, dirigido técnicamente por Mario Fortunato, alineó a Alejandro Mena; Ludovico Bidoglio y Ramón Mutis; Antonio Moreyras, Adolfo Pedemonte y Pedro “Arico” Suárez; Donato Penella, Esteban Kuko, Domingo Tarascone, Roberto Cherro y Antonio Alberino. El visitante, Atlanta, jugo conAtilio DomingoMaccarone; R. Basílico y A. Somón; A. Pascale, A. Torres y F. Massey; E. Tibaldi, P. Cerrato, C. Iglesias, S. Iglesias y Bejamín Delgado.
Sorpresivamente a los 10’ Tibaldi abrió el marcador enmudeciendo al público presente, empató a los 15’ Antonio Alberino y desniveló a los 40’ Donato Penella. En el segundo tiempo, a los 28’ estiró el score Roberto Cherro y dio cifras definitivas a los 35’ Domingo Tarascone.
Finalizado el partido, los jugadores de Boca Juniors, aplaudidos inclusive por sus pares de Atlanta, dieron la vuelta olímpica (quizá la primera en su historia y a su vez la primera en su cancha), ante el delirio de su público, que había colmado las instalaciones.
ElDomingo, 31 de Mayo de 1931, en esta cancha de madera, Boca Juniors enfrentó a Chacarita Juniors, empatando en cero gol por bando, en lo que fue el primer encuentro en condición de local jugado por Boca Juniors en el profesionalismo.
Bajo las órdenes del juez Consolado Nai Foino (padre de aquel del famoso penal que Roma le atajara a Delem), Boca Juniorsalistó a Alejandro Mena; Ludovico Bidoglio y Ramón Mutis; Antonio Moreyras, Manuel Fleitas Solich y Adolfo Pedemonte; Domingo Tarascone, Francisco Varallo, Florentino Vargas, Roberto Cherro y Mario Alberino. Por su parte Chacarita Juniorshizo lo propio con Alterio; Cichino, De Vicente; Duchini, Gil, Brizuela; Cruz, Seijas, Stagnaro, Stochetti y Gómez.
En los comienzos del profesionalismo, Boca Juniors volvió a coronarse campeón en su propio estadio en 1934 y 1935, enfrentando a Platense y a Tigre, a quienes venció cómodamente en ambas oportunidades por 5 a 1 y 3 a 0, respectivamente. Estos fueron los últimos títulos obtenidos como local en la vieja cancha de madera, la que si bien en estos años no fue un reducto inexpugnable como en los años 20, no era fácil que los visitantes lograran triunfos en ella.
Boca Juniors jugó su último partido en su cancha de madera el Domingo, 10 de abril de 1938, como parte de la segunda fecha del torneo de ese año, enfrentando a River Plate,   quien lo derrotó por 2 a 1. Boca Juniors alistó esa tarde a Juan Estrada; Luis Menéndez y Víctor Valussi; Antonio Martínez, Francisco Angeletti y Pedro “Arico” Suárez; Alfredo Gáspari, Alfredo González, Francisco Varallo, Roberto Cherro y Miguel Careri. El gol boquense fue marcado por el puntero Miguel Careri, quien de esta forma convirtió el último gol boquense en la vieja cancha de madera, para dar paso, en el mismo lugar que ocupaba, a la gloriosa Bombonera.
Parte de los tablones de la vieja cancha de madera forman hoy parte de las tribunas de la actual cancha de Ferro Carril Oeste, en el Barrio de Caballito, donde Boca Juniors actuó como local mientras se construía la gloriosa “Bombonera”, la cual lleva actualmente el nombre de quien fuera uno de los presidentes más destacados en la historia de Boca Juniors: Alberto Jacinto Armando, que ocupó ese cargo durante más de 25 años, a partir de 1954. Aunque su verdadero nombre es, fué y sera Camilo Cichero quien fuera tambien presidente e impulsor de su construccion durante su mandato. Hacia 1937 la comisión directiva encabezada por el presidente Dr. Camilo Cichero decidió organizar un concurso para la construcción del estadio. El proyecto ganador, que privilegiaba el uso de estructuras de hormigón armado, obtuvo el primer premio del concurso, y con ello la adjudicación de la obra. El autor del diseño fue el arquitecto esloveno Viktor Sulčič, quien, junto con el geómetra Raúl Bes, y el ingeniero José Luis Delpini, formaban el estudio Delpini-Sulcic-Bes,3 los que también fueron responsables del famoso Mercado de Abasto de Buenos Aires. Uno de los mayores méritos del proyecto de Delpini-Sulcic-Bes fue realizar un diseño acorde con el escaso espacio disponible, una de las características fundamentales de La Bombonera, aunque originalmente estaba contemplada una cuarta tribuna, que nunca pudo construirse. Camilo Cichero saco una hipoteca sobre su casa para poder contar con los fondos suficientes para iniciar la obra. Pero dichos fondos no alcanzaban y el presidente de la Nación, Roberto Marcelino Ortiz, le otorgo un préstamo al C.A.B.J. con la condición que la presidencia de Boca pasara a manos de su yerno el que después fuera presidente de Boca Juniors el Dr. Eduardo Sánchez Terrero y durante su presidencia finalmente se inaugura la gloriosa Bombonera. Sin embargo y nobleza obliga,  Terrero le cede el honor de dar el puntapié inicial a su gestor el Dr. Camilo Cichero. El nuevo Estadio (sin la tercera bandeja ni la tribuna hoy denominada “Natalio Pescia”) fue inaugurado el Sábado, 25 de mayo de 1940, con la disputa de un partido amistoso en el cual Boca Juniors se impuso por 2 a 0 a San Lorenzo de Almagro. Para este partido inaugural Boca Juniors alistó a Juan Estrada; Segundo Ibáñez y Víctor Valussi; General Viana, Ernesto Lazzatti y Arcadio López; Anibal Tenorio, Ricardo Alarcón, Jaime Sarlanga, Bernardo Gandulla y Ferenk Sohn. Ingresaron luego Francisco Angeletti, Domingo Gelpi, Luis Carniglia y Américo Di Leo.
El primer gol en esta cancha (y también el segundo) lo logró el entreala derecho de Boca Juniors, Ricardo Alarcón, quien llamativamente marcaría también el primer gol de Boca en un encuentro oficial en su cancha, frente a Newells Old Boys, el Domingo, 2 de junio de 1940, cuando Boca ganó por 2 a 0 al equipo rosarino.

Ese mismo año, Boca Juniors se consagró campeón, en la misma Bombonera, enfrentando al escolta Independiente y derrotándolo por 5 a 2, el 8 de diciembre de 1940, al disputarse la 32ª. (antepenúltima) fecha del torneo. En ese partido, bajo las órdenes del árbitro Jorge J. Alvarez, Boca Juniors alistó a Juan Estrada; Segundo Ibáñez y Víctor Valussi; Arcadio López, Ernesto Lazzatti y Pedro “Arico” Suárez; Francisco Sohn Sas, Ricardo Alarcón, Jaime Sarlanga, Bernardo Gandulla y Raúl Emeal. Independiente, jugó con Carlés (que reemplazó al titular Fernando Bello); Fermín Lecea y Sabino Coletta; Luis Franzolini, Raúl Leguizamón y Celestino Martínez; Juan José Maril, Vicente De la Mata, Arsenio Erico, Antonio Sastre y Juan José Zorrilla.
Abrió la cuenta el paraguayo Arsenio Erico a los 2', empató Jaime Sarlanga a los 23', volvió a desnivelar para el rojo en puntero izquierdo Zorrilla a los 32' y a empatar de inmediato Jaime Sarlanga a los 33'. En la segunda etapa Raúl Emeal puso al frente a Boca a los 58', Bernardo Gandulla alargó la diferencia a los 67' y nuevamente Gandulla dio cifras definitivas al marcador a los 89', para el equipo dirigido técnicamente por Sobral.
Durante la década del 50, y con el apoyo económico del Estado, Boca Juniors completó el aspecto actual de La Bombonera, con el agregado de la tercera bandeja a las 3 tribunas existentes. 
La iluminación artificial de la Bombonera fue inaugurada el 12 de Febrero de 1953, en un encuentro amistoso nocturno disputado frente al Hajduk Split, campeón de Yugoslavia, con quien Boca Juniors empató en un gol, al cual asistió el entonces Presidente de la Nación, General Juan Domingo Perón, reconocido hincha boquense.
El año 1954 volvió a encontrar a Boca como Campeón en su casa, luego de un lapso de 10 años sin obtener títulos locales y 14 sin obtenerlos en su propia cancha, al enfrentar a Tigre y derrotarlo por un exiguo 1 a 0, con gol conquistado a los 42’ por Miguel Angel Baiocco, con fuerte remate que venció la estirada del “León de Wembley”, Miguel Rugilo.
El Domingo, 11 de noviembre de 1954, en la anteúltima fecha del campeonato, bajo las órdenes del juez inglés Harry Hartles, Boca Juniors, dirigido técnicamente por el “Pibe de Oro” Ernesto Lazzatti, alistó a Julio Elías Mussimessi; Juan Carlos Colman y Héctor Otero; Francisco Lombardo, Eliseo Víctor Mouriño y Natalio Pescia; Juan Carlos Navarro, Miguel Angel Baiocco, José Borello, Fausto Rosello y Julio Marcarian. Por su parte Tigre, quien se constituyó en un peligroso rival pese a las especulaciones previas del periodismo de esa época, formó con Miguel Angel Rugilo; Oscar Gaggino y Rodolfo Bores; Fernando Manuel Gianserra, José María Golias e Hidalgo; Héctor Adolfo De Bourgoing, Juan Carlos Burgos Laguna, José Domingo Chirico, Ernesto Paolazzi y Ernesto Bernardo Cucchiaroni.
Cabe destacar que durante la temporada de 1954, Boca Juniors llenó todos los estadios, transformando a este año en el de mayor cantidad de entradas vendidas en la historia del fútbol argentino.
Durante los primeros años de la década de los 60, “La Bombonera” volvió a ser cita de históricos enfrentamientos, sobre todo con el rival de todos los tiempos, River Plate. Fue en el arco que da espaldas a la Casa Amarilla donde Antonio Roma, el Domingo 9 de Diciembre de 1962, le detuvo el penal al delantero brasileño Lázaro Ruiz “Delem”, cuando restaban apenas unos minutos para la finalización del partido, que finalmente ganó Boca por 1 a 0, con gol de penal de Valentim en el primer tiempo. El árbitro Nai Foino fue duramente cuestionado por los jugadores riverplatenses por varios minutos y por la prensa durante más de 30 años, debido a que incuestionablemente, Antonio Roma se adelantó para contener el disparo fuerte y esquinado del delantero riverplatense. Sin embargo, nadie se encargó de aclarar que el árbitro otorgó un penal en extremo dudoso  (supuesto empujón de Simeone a Artime) al equipo visitante faltando sólo 5 minutos para finalizar el encuentro.
En la misma cancha, el miércoles siguiente, Boca Juniors se consagró campeón al vencer por 4 a 0 a Estudiantes de La Plata, con goles del inolvidable goleador brasileño, Paulo Valentim, en 2 oportunidades, Norberto Menéndez y Hugo Pueblas.
Esa tarde, bajo las órdenes del árbitro Robert Turner, Boca Juniors, dirigido técnicamente por José D’amico, alistó a Antonio Roma, José María Silvero y Silvio Marzolini; Carmelo Simeone, Antonio Ubaldo Rattin y Orlando Pecanha Carvalho; Héctor Pueblas, Norberto Menéndez, Paulo Valentim, Hugo Pezzi y Alberto Mario González. Estudiantes de La Plata, dirigido por Saúl Ongaro, formó con Oleinicky; J Gutiérrez y Chevez; Castillo, Espeola y Rafael Albretch; Federico Horster, Juan Carlos Rulli, Rubén Carlos Koroch, Eduardo “Bocha” Florez y Juan Ramón “La Bruja” Verón (que ese día debutó en primera división).
Dos años después, y nuevamente frente a River Plate, Boca Juniors obtuvo una nueva estrella, tras empatar en un tanto por bando, conseguidos por Luis Artime a los 11’ del primer tiempo para los millonarios y por Norberto Menéndez, con un disparo de bolea desde fuera del área, en el arco que da espaldas al Riachuelo, a los 21’ del segundo para Boca.
ElDomingo, 29 de noviembre de 1964, con motivo de disputarse laanteúltima fecha del campeonato y con arbitraje de Aurelio Bosolino, Boca Juniors, dirigido por Adolfo Pedernera, alineó a AntonioRoma; José María Silvero y Silvio Marzolini; Carmelo Simeone, Antonio Ubaldo Rattin y Orlando Pecanha; Benicio Ferreira, Ernesto Grillo, Paulo Valentim, Norberto Menéndez y Alberto Mario González. Por su parte River Plate, dirigido por José Curti, formó con Amadeo Raúl Carrizo; José Ramos Delgado y Roberto Matosas; Juan Carlos Sainz, Vladislao Cap y José Varacka; Luis Cubilla, Enrique Fernández, Luis Artime, Ermindo Onega y Jorge Solari.
No pasaría más de un año para que la historia se repitiera y Boca Juniors arrebatara a su eterno rival el campeonato en las postrimerías del mismo. Ambos rivales llegaron igualados en puntos y fue River Plate quien se puso en ventaja a poco de comenzar el encuentro, por intermedio, cuando no, de Luis Artime. Ya en el comienzo de la etapa complementaria, cuando la cosa se ponía fea para los locales, “el loco” Pianetti, con un disparo de más de 25 metros (cada día parecería que pateó desde más lejos) venció a Carrizo, empatando el partido. Fue faltando 5’ que ocurrió el milagro esperado, cuando una escapada del Beto Menéndez por la punta izquierda terminó con un disparo al arco, que luego de desviarse en José Ramos Delgado se introdujo en el arco de River Plate.
Sin embargo fue el Domingo, 19 de Diciembre de 1965, frente a Atlanta, con el arbitraje de Angel Norberto Coerezza, cuando Boca Juniors pudo consagrarse definitivamente campeón, al derrotarlo sin atenuantes por 3 goles a 1. Los goles fueron convertidos por Pianetti en dos oportunidades y Angel Clemente Rojas, todos en el segundo tiempo, descontando en las postrimerías del partido Zárate para Atlanta. Boca Juniors, dirigido por Néstor Raúl Rossi, alistó aAntonio Roma; José María Silvero y Silvio Marzolini; Carmelo Simeone, Antonio Ubaldo Rattín y Alcides Vicente Silveira; Oscar Antonio Pianetti, Ángel Clemente Rojas, Alfredo Hugo Rojas, Norberto Menéndez y Alberto Mario González. Por su parte Atlanta, hizo lo propio con Carlos Biasutto; Clariá y Rico; Vasallo, Carlos Timoteo Griguol y Andrade; Jorge Domínguez, Marcos Zarich, Rubén Zárate, Juan Carlos Punturero y Villegas.
Pasarían muchos años antes que Boca Juniors pudiera consagrarse nuevamente campeón en su cancha, más precisamente hasta 1978, cuando obtuvo el título de Campeón de América al derrotar por 4 a 0 al Deportivo Cali, dirigido por el argentino Carlos Salvador Bilardo.
Fue la noche del 28 de Noviembre de 1978 cuando el Boca Juniors del “Toto” Juan Carlos Lorenzo, alistó a Hugo Orlando Gatti; Vicente Pernía, Pedro Manuel Francisco Sá, Roberto Mouzo y Miguel Angel Bordón, Jorge José Benítez (luego Carlos José Veglio), Rubén José Suñé y Marzoio Nicasio Zanabria, Enrique Ernesto Mastrángelo, Carlos Horacio Salinas y Hugo Osmar Perotti.
Deportivo Cali, que había igualado con Boca Juniors 0 a 0 en el partido de ida, en Cali (Colombia), alistó a Zape, Ospina (luego F. Castro), M. Escobar, Caicedo, Heriberto Correa, Arce Valverde, Landucci, Otero (luego Umaña), Torres, Néstor Leonel Scotta, Alberto J. Benítez. Los goles fueron conseguidos a los 15' por Perotti, a los 60' por Mastrángelo, a los 71' por Salinas y nuevamente, a los 85', por Perotti, figura del partido.
El peruano Edison Pérez dirigió el partido, que contó con un espectador de lujo, nada menos que el Rey de España, que trajo suerte a Boca, al igual que su antecesor Alfonso XII, en la oportunidad que venciera a Real Madrid durante la Gira Europea de 1925.
Cabe destacar que este fue el único título ganado en la Bombonera por el equipo dirigido por Lorenzo, que previamente fue Campeón en las canchas de River Plate (frente a Unión de Santa Fe por el Metropolitano 1976), de Racing Club (final del Nacional 1976 frente a River Plate), en el Estadio Centenario de Montevideo (final de Copa Libertadores 1977 frente a Cruzeiro de Belho Horizonte) y en el Villpark de Karlshure (Alemania Occidental) frente al Borussia por la Copa Intercontinental de 1977.
Cuatro años más tarde, y con la presencia de otro Rey, Diego Armando Maradona, pero esta vez en sus filas, Boca Juniors volvió a obtener un título en su casa, después de 15 años de espera. El desenlace tuvo lugar el Domingo 16 de Agosto de 1981, frente al Racing Club, con quien empató en un tanto por bando, conseguido de penal por Marandona a los 41’ del primer tiempo.
Bajo las órdenes del juez Abel Gnecco, jugaron por Boca Juniors, dirigido por Silvio Marzolini: Hugo Orlando Gatti; José María Suárez, Roberto Mouzo, Oscar Alfredo Ruggeri y Carlos Córdoba; Jorge José Benítez, Roberto Pasucci y Miguel Brindisi; Osvaldo Escudero (45' Marcelo Trobbiani), Diego Armando Maradona y Hugo Osmar Perotti. Por Racing Club, dirigido por José Omar Pastoriza, lo hicieron Vivalda; Julio Jorge Olarticoechea, Van Tuyne, Leroyer, Osvaldo Alejandro Pérez; Juan Alberto Barbas, José Orlando Berta y Juan Ramón Carrasco; Gabriel Humberto Calderón, Villarruel (45' Omar Pedro Roldán) y Muñiz (54' Carlos Alberto Caldeiro).
Fueron expulsados en ese encuentro 5 jugadores: Julio Olarticoechea y Hugo Perotti a los 5’, Carlos Córdoba a los 13’, Ramón Carrasco a los 15’ y finalmente Roberto Pasucci a los 89’.
Durante la presidencia de Mauricio Macri, se realizó una remodelación del estadio, que consistió entre otras modificaciones en la construcción de una nueva tribuna en el sitio que antiguamente ocupaban los viejos palcos y donde se encontraba la famosa torre.
La inauguración se realizó el Jueves 1 de Agosto de 1996, con la realización de un partido amistoso, en el cual Boca Juniors enfrentó al representativo de la Universidad de Chile, al cual derrotó por 3 goles a 1, convertidos por Sebastián Rambert, Cáceres y Carrario.
Sin embargo, la inauguración oficial de estas obras no fueron acompañadas por un resultado deportivo acorde con la envergadura de las obras, ya que esa misma tarde (Domingo, 4 de Mayo de 1996) Boca Juniors cayó derrotado frente a Gimnasia y Esgrima de La Plata por el inusual tanteador de 6 goles contra 0. Ese partido, un jugador e ídolo de Boca Juniors, Alberto Mársico, pateó un penal y a pesar de lo abultado del marcador y del aplauso de cierta parte de la parcialidad boquense, lo grito con todas sus ganas.
Lo que sigue es historia reciente, llena de logros locales e internacionales que la tuvieron como protagonista. Las consagraciones frente al Cruz Azul y la Universidad Autónoma, ambos de México, por las Copas Libertadores de América y Sudamericana, respectivamente. Los campeonatos locales definidos frente a Independiente (primero de la Era Bianchi), Estudiantes de La Plata (con gol de Matías Arce) ………
Hoy día, con una capacidad cercana a las 60.000 personas, la Bombonera es reconocida mundialmente como uno de los “Templos del Fútbol”, ubicado en el Barrio más pintoresco de la ciudad de Buenos Aires, donde concurren miles de turistas anualmente, provenientes de los más variados confines del mundo.
A diferencia de lo ocurrido con otras instituciones de nuestro medio, la cancha de Boca fue producto del sacrificio de una modesta Institución de Fútbol y no de la ingerencia “desinteresada” del poder político de turno.
 

FUENTE: INTERNET

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