Un arquero sin manos y un DT cobarde dejan a Boca sin copa

Sin arquero, sin DT, sin goleador...sin copas. Así quedó este Boca después del partido de hoy con Banfield.

En la previa todo era una fiesta, la cancha estaba que desbordaba, como si fuera un superclásico. Boca debía ganar para continuar en la lucha por entrar en la copa, también había que vencer porque Palermo se despedía en la Bombonera. Un tarde cargada de emociones que tenía como expectador de lujo a Banfield.

El primer tiempo de Boca se podría dividir en dos partes. El comienzo fue un dominio total del equipo donde trató de materializar todo en un gol de Martín para que pueda convertir en su despedida, lamentablemente no se logró y con el paso de los minutos Banfield se fue apoderando del medio campo y por lo tanto del juego. Sin embargo cuando atacaba no era preciso y la defensa de Boca respondía sin sobresaltos. Boca intentó sobre el final de la primera etapa pero tampoco encontraba la manera de quebrar el 0.

El gol Xeneize vino desde el vestuario. La jugada comenzó con Chavez, el mejor del partido, intentando clavar con su pierna no hábil el gol. El arquero de Banfield respondió pero dio rebote y el zurdo Colazo capturó la pelota y de derecha ponía a Boca adelante en el marcador. La Bombonera ya era una fiesta, Boca ganaba y la despedida era la gran frutilla del postre.
Pero...El DT, a los 30 del ST, hizo un cambio inesperado. Sacó a Mouche, que aunque no era el mas claro aportó mucho en este equipo, y puso a Rivero. Boca pasó de un 4-3-1-2 a un 4-4-1-1. El equipo, previo al cambio, ya se mostraba mas defensivo, se retrasó en el campo de juego (como hizo durante todo el torneo cada vez que convertía) y cedió protagonismo.

Banfield con muy poco empezó a asomar y asustar. Boca solo agrandaba a Banfield. Y cuando ya faltaba nada para que la fiesta sea completa, apareció un nuevo error de Luchetti (el 4to gol que se come de los últimos 5 que le hicieron a Boca) y otra vez nos quedamos sin los tres puntos. Tres puntos que significaban muchas cosas, porque Boca ya quedó practicamente afuera de la copa (salvo una catástrofe en la ultima fecha), se quedó sin fiesta completa para Martín y dejo un gusto amargo en todos los hinchas Xeneizes.

Este partido lo perdieron (en esta instancia el empate es una derrota) en primer medida Falcioni con un cambio cobarde dejando a Boca con tan solo un delantero y en segunda instancia Luchetti.

Y el hincha por mas de que haya disfrutado con la fiesta, pudo dar su veredicto porque cuando entre muchas imagenes mostradas en la pantalla gigante (que poca funcionalidad se le dio en al fiesta) apareció Falcioni el chiflido fue abrumador, y sentenció al DT con una silvatina ensordecedora. El mensaje, fue mas que claro.

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Escrito por Nicolas Eliaschev el 13 de junio de 2011 00:53