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Boca perdió, quedó fuera de todo, y sin mostrar un poco de rebeldía y con más errores que aciertos

Un 2 a 1 que precipita una crisis más dentro de la gestión Angelici

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Boca fue a Rosario a buscar revancha del clásico, sin RIquelme pero sabiendo que debía revertir la imagen del domingo pasado.

Empezó jugando bien, era mas que un apático Central y generaba juego. La falta de Riquelme se notaba pero alcanzaba con lo que producían los jugadores. El gol de Boca llegó rápido. Gigliotti, en offside, logró impactar de cabeza un centro y el delantero ponía el 1 a 0.

El equipo de Bianchi siguió teniendo la pelota pero ya sobre el promedio del partido la empezó a perder y Central fue el que se fue arrimando al arco de Orion pero sin lograr inquietarlo. El Xeneize se iba al vestuario ganando 1 a 0.
 
El segundo tiempo iba a ser la debacle total. Central mas volcado en ataque dejaba espacios que los jugadores de Boca no supieron aprovechar. Gigliotti primero y luego Gago tuvieron sendas chances para aumentar la ventaja pero dilapidaban sus oportunidades. Y en ese momento Boca tuvo sos 3 minutos fatídicos. En dos jugadas consecutivas Central pasaba a ganar el partido y darlo vuelta. La desazón era tremenda. Boca pasaba de ganarlo a perderlo en un abrir y cerrar de ojos, y si quedaba alguna chance para pelear el campeonato, en 2 minutos la terminaron de derrumbar. Después solo quedo esperar al final del partido. El equipo fue para adelante pero no se les caía una idea.
 
Boca pierde su segundo partido consecutivo, y se aleja definitivamente de la lucha por el campeonato. Una derrota que duele y mucho. Hay jugadores muy por debajo de su nivel y ni hablar de la alarma falta de ganas que se muestran en algunos momentos. Pero la génesis del problema de Boca radica en la gestión de Angelici, a casi dos años y medio de su asunción y a uno y medio de su final, navega por una serie de fracasos desde el día que asumió. 

Angelici siempre dividió aguas y se dedico a enfrentar a la familia Xeneize aun antes de ser premiado con el puesto de  presidente,  con declaraciones dignas de un patrón de estancia pero lejanas a un mandatario ubicado en el contexto y realidad de un club tan grande como Boca Juniors.

El cargo le quedo inmenso a este sujeto con pocas luces y pésimo jefe de equipo de laburo, generando siempre discordia en un club que necesita urgentemente llegar lo más rápido posible a diciembre del 2015 sin que las heridas que queden sean tan condicionantes y desembarazarse de esta conducción que ha vaciado sistemáticamente al equipo.

Hoy Boca quedo nuevamente afuera de todo, con un equipo chiquito futbolísticamente y sin hambre ni sacrificio, con un cuerpo técnico confundido como nunca pensamos ver y con una dirigencia que no acertó una desde que desembarco en el club para trabajar para ella y no en pos de Boca. O mejor dicho y  fin de cuentas ellos saben que la culpa de todo lo que pasa en Boca es de Riquelme. Al menos eso es lo que estos mediocres personajes piensan. Pobre Boca...
 
Mañana Boca cumple 109 años. Y Boca fue, es y seguirá siendo más grande que todos los jugadores, técnicos y dirigentes. Ojala quienes conducen Boca lo entiendan.

Formaciones

Rosario Central: Mauricio Caranta; Paulo Ferrari, Tomás Berra, Alejandro Donatti y Rafael Delgado; Hernán Encina, Nery Domínguez, Jesús Méndez y Jonás Aguirre Avalos; Walter Acuña y Sebastián Abreu. DT: Miguel Ángel Russo.

Boca: Agustín Orión; Hernán Grana, Daniel Díaz, Juan Forlín y Emanuel Insúa; Cristian Erbes, Federico Bravo, Fernando Gago y Juan Sánchez Miño; Juan Manuel Martínez y Emmanuel Gigliotti. DT: Carlos Bianchi.

Estadio: Gigante de Arroyito.
Hora: 17:10 hs.
Arbitro: Fernando Rapallini.


Carlos Bianchi suma cuatro partidos seguidos dando explicaciones de por qué su equipo no logra obtener un triunfo. En esta oportunidad volvió a caer en un lugar común que han tenido sus declaraciones a lo largo del año: la falta de contundencia para definir los partidos.

"Lo pudimos asegurar en el primer tiempo y en el segundo, pero no lo aprovechamos", declaró con resignación el técnico de Boca. "Cuando no le das el golpe final al adversario herido, sigue respirando", añadió.

El "Virrey" fue conciso y le atribuyó la derrota a los errores propios más que a los méritos ajenos. "Nos equivocamos y lo terminamos pagando".

Cuando le preguntaron sobre la solución a la falta de victorias, el técnico contestó: "No tenemos excusas. Hay que trabajar. Somos profesionales". Y volvió a repetir que la solución inmediata es definir los partidos.

El técnico prefirió no referirse al gol en off side de Gigliotti. Solo atinó a decir que le habían comentado que el delantero estaba en posición adelantada cuando convirtió en el comienzo del encuentro.

También explicó cada uno de los cambios que realizó. Riaño ingresó por Gigliotti para poder aguantar la pelota y porque el nueve arrastraba dolor por un golpe; Acosta lo hizo por Martínez porque el "Burrito" estaba cansado, y "Chiqui" Pérez suplantó a Erbes porque al "Pichi" le dolía la rodilla. "El partido estaba en el área contraria. Si hubiésemos convertido el segundo, se terminaba el partido", argumentó.

Fuente: PlayFutbol